(Todas las imágenes que se muestran han sido dibujadas por los autores de la web.)
Escepticismo:
“No vemos las cosas como son, sino como somos nosotros”, reza el aforismo. Experiencias e intereses (representados por los diferentes tarros cilíndricos) van entrelazándose para formar un conjunto de formas de mirar (representados por las caras). Unas veces tienen objetivo consciente otras no. Quimeras, razones, lógicas ocultas conforman un universo de prioridades. Adornados por creencias o aparentes necesidades recrean el particular mundo individual. “Nada es verdad, nada mentira; todo es según el color del cristal con que se mira”, recoge otro aforismo. Circunstancias, ámbitos, manera de entender y valorar, abren esperanzas (representadas por la mariposa sugerida y las flores). Las formas de mirar, extrañas o no, grises o blancas configuran deseos. En el fondo sabemos de la futilidad de eso que llamamos necesidad, disfrazada de buenas intenciones. Más en el fondo la Esencia sabe de otras realidades y desconfía. Escepticismo. Desconfianza, incertidumbre y preocupación intentan tomar las riendas. En el centro tres cilindros intentan aferrarse a la unidad. En los extremos otros dos flanquean la vacuidad del deseo. El escepticismo se alza como verdadero protagonista, anclando un propósito velado: desconfiar de espejismos y falsas ilusiones.
Quimeras:
Las Quimeras eran animales fantásticos, imposibles. Cuando hablamos de quimeras nos referimos a ilusiones o sueños, producto de lo que se anhela, aunque muy improbable que se haga realidad. A la izquierda el dibujo presenta un reloj de arena, roto; representa la quimera del tiempo. Pasamos el tiempo anclados al pasado o temerosos y pre-ocupados por el mañana. La arena deja de serlo y se convierte en negros nubarrones de tormenta. Por encima de la tormenta, de los embates de la vida, desdibujada, se eleva un ave, por encima del tiempo; en el centro, testimoniando la importancia del presente, de elevarse viviendo el ahora. Trascender a otras formas de entender el tiempo. Volar, quizás soñar. A la derecha otro elemento impreciso. Representa los sueños e ilusiones. Anclados al suelo nos elevamos al cielo. La figura, aparentemente de espaldas, iluminando está mirando el ave, que se le acerca. Por la izquierda, la tormenta le acerca una hoja; representa esa parte de realidad que intenta sugerirnos que podemos mirar las estrellas, pero sin olvidar el suelo, con toda vida, que nos sustenta. Vivimos quimeras, arrogancia y vanidad, quizás por eludir el compromiso de afrontar un amenazante presente.
Uso del portal: El usuario asume la responsabilidad del uso del portal y se compromete a hacer un uso adecuado de los contenidos.
Protección de datos: “Amuyuni.es” cumple con las directrices de la Ley Orgánica 15/1999 de 13 de diciembre de Protección de Datos de Carácter Personal, el Real Decreto 1720/2007 de 21 de diciembre por el que se aprueba el Reglamento de desarrollo de la Ley Orgánica y demás normativa vigente en cada momento, y vela por garantizar un correcto uso y tratamiento de los datos personales del usuario.